domingo, 11 de enero de 2009

Reporte Final

Reporte final


El presente trabajo abordará el comienzo del renacimiento y algunos aspectos relevantes, tratará sobre la sociedad y la economía existente en ésta etapa, asimismo buscará dar a conocer como fue surgiendo la ciencia y la tecnología, de la misma forma abordará el tema de los ingenieros de la época (Gianello Turriano y Leonardo Da Vinci), sus inventos y creaciones, esto nos llevará a entender como fue cambiando la sociedad renacentista a partir del surgimiento de nuevas técnicas y ciencias.

El renacimiento se dio en los siglos XV y XVI en Florencia Italia, en las postrimerías de la Edad Media, hacia el año 1300 D.C., al mediar el siglo XIV, el renacimiento era ya un movimiento cultural, claro y distinguible[1]. Empezó con la difusión de la idea del humanismo en la cual el hombre era el centro del universo, -recordemos que en la edad media Dios era el centro del universo, esta idea cambia con la llegada del humanismo-.

La mentalidad burguesa, podríamos definirla, no tanto como la codicia o la búsqueda del provecho, que se dan en todos los tiempos y en todas las sociedades, sino más bien como la búsqueda de un provecho siempre mayor, indefinido, la búsqueda de rentabilidad, la acumulación de beneficios que, en vez de gastarse inútilmente, se invierten en empresas más importantes que puedan aportar un desarrollo económico mayor y una mejor utilidad social. La sociedad renacentista es indiscutiblemente una sociedad expansiva e innovadora, pero esta sociedad es más aristocrática que burguesa, a pesar de las apariencias[2].

A partir de mediados del siglo XV hasta finales del siglo XVI, en Europa se viven cambios significativos en todos los aspectos: sociales, económicos, políticos, etc. Se podría decir que se paso del feudalismo al capitalismo. Es en esta etapa donde surgen las artes (gótico), la literatura y las ciencias, se vive un considerable aumento de la población. El dinero pasa a convertirse en el motor de la economía y con ello la sociedad tiende a cambiar sus costumbres, es decir, la gente gusta de gastar más de lo que gana, debido al lujo en su vida cotidiana; gusta de vestir bien, lucir joyas, participar en fiestas y banquetes, etc. Esta nobleza posee rasgos originales, entre ellos su conversión a la cultura: el caballero ideal ya no es el guerrero, como en la Edad Media, sino el cortesano, el que sabe manejar a la vez o alternativamente la pluma y la espada. Es la aristocracia, más que la burguesía, la que ha difundido en España las ideas, los temas y las formas del Renacimiento italiano.

Es durante el renacimiento donde el capitalismo mercantil se desarrolla, como una consecuencia del auge económico, es fuente de grandes ganancias para los que se dedican a comprar los productos más cotizados en el mercado europeo, la lana merina, por ejemplo, para exportarlos al extranjero e importar otros productos destinados al consumo interior. Cobra así importancia la figura del mercader, comerciante al por mayor, a la vez exportador e importador y en ocasiones banquero, estos mercaderes son auténticos burgueses, dinámicos, emprendedores, pero no tienen conciencia de formar una clase homogénea, un grupo social original. La sociedad del siglo XVI sigue siendo una sociedad estamental fundada en el privilegio; por eso la integración a la nobleza representa la consagración del éxito social y la meta a la que aspiran todos los que, conquistadores, letrados o mercaderes, venidos de las capas inferiores, han alcanzado cierto nivel de fortuna.

La ciencia en el renacimiento

¿Cómo surgió la ciencia y la tecnología en el renacimiento?

¿Qué relevancia tuvo la ciencia y la tecnología en la etapa llamada renacimiento?

La expansión territorial, militar y administrativa que llevó a cabo durante el siglo XVI España, no podía haber tenido lugar sin el respaldo de un paralelo desarrollo científico y tecnológico, la ciencia y la tecnología no sólo seguían a las águilas del imperio trayendo el conocimiento de nuevos y distantes territorios y culturas, sino que también hacían posible su vuelo, la mejora de la tecnología militar, tanto ofensiva, como defensiva mediante el perfeccionamiento de armas de fuego (cañones y arcabuces); sin esta mejora de la tecnología (militar e ingenieril), no se hubiera podido realizar la conquista ni mantener lo conquistado.

A inicios del siglo XVI, los reyes católicos, crearán instituciones, cargos y cátedras, como los asociados a la Casa de contratación de Sevilla, el Consejo de Indias o a la corte, a fin de satisfacer las nuevas necesidades de conocimiento derivadas de una política exterior ambiciosa. Fueron el crecimiento económico y las transformaciones sociales, con un incremento del comercio y un aumento de la población urbana, los principales factores motores de la transformación tecnológica.

Nuevas necesidades a satisfacer: cultivos más intensos mediante la introducción de nuevo sistema de riego; mejorar la extracción de minerales, mediante nuevas técnicas mineras; producción masiva de productos manufacturado (tejidos o metales); optimizar la utilización de fuentes de energía (eólica y la hidráulica); proveer medios de transporte seguros que permitiesen la movilidad de mercancías y personas y el abastecimiento de agua para el consumo y saneamiento de las ciudades.

Es, tal vez, el humanismo la corriente de pensamiento que expresa de un modo más acabado este nuevo modo de concebir el mundo que denominamos moderno, y en el cual la acción y la tecnología ocupan un lugar central. La curiosidad por el mundo natural se convertiría en uno de los signos más característicos del perfecto individuo humanista. Era esta corriente, el discurso perfecto para la defender las aspiraciones universalistas de los reyes españoles.

El arte de la Guerra como medio de avance tecnológico.

El siglo XVI fue de grandes guerras, en las cuales utilizaban sofisticados y masivos modos de matar. La guerra fue uno de los motores principales de los avances científicos y tecnológicos del siglo XVI. El juego de estrategias diseñadas sobre el mapa por los generales del príncipe y puestas en práctica por una masa anónima de infantes dotados de mosquetes y cañones.

¿Quién era Juanello Turriano y cuáles fueron sus inventos?

Uno de los principales ingenieros del renacimiento fue Juanello Turriano (1500-1585).

Nacido hacía 1500, en un pueblo cercano a Cremona en Lombardía Italia, importante foco de producción industrial durante la época. Su nombre real era Giovanni, conocido como Gianello o Janello, en español derivó en Juanello o Juanelo. Fue un joven humilde dedicado al pastoreo, durante las noches que cuidaba a su rebaño deducía el curso de los astros sin conocimiento o instrumentos. Fue Giorgio Fondulo, médico, matemático y profesor, fue quien inicio a Turriano en los fundamentos de la astronomía.

Individuo formado en el ámbito académico, cuyos conocimientos tienen más que ver con el aprendizaje que con la teoría y especulación escolástica. Aprendió en el taller de su padre a construir y reparar instrumentos mecánicos, entró como aprendiz a un taller de relojería en Cremona en donde llego a ser maestro relojero y mecánico. Principal representante del arte relojero.

Encuentro de Carlos V y Turriano (Bolonia 1530)

Ferrante Gonzaga (Gobernador de Milán), le regalaría al emperador el famoso reloj astronómico, el astrarium, obra maestra del siglo XVI. Turriano reconstruyó durante 20 años, mediante cálculos, que una vez realizados invirtió tres años en la conclusión de la pieza.

Para construir las ruedas inventó un torno que tallaba los espacios de los dientes con inigualada precisión y rapidez.


Al servicio de Felipe II

A la muerte de Carlos V, los relojes planetarios coleccionados fueron puestos a cargo de Juanelo, ocupando el mismo puesto con Felipe II, quién le obligo a residir el la corte como criado.

Inventos

Juanelo aconsejó a Felipe II en las construcciones de las grandes obras de ingeniería, especialmente hidráulicas, gracias a estas obras se le conoció como el rey prudente.

Reforma del calendario emprendida por el papa, debido a un desajuste entre el tiempo astronómico y la fecha del calendario alcanzaba ya más de una decena de días.[3]

Los Ingenieros

¿Es posible que un hombre pueda llegar al conocimiento de los efectos naturales sin haber leído jamás libros escritos en latín?

Bernard Palissy era un aprendiz de vidriero que mediante la búsqueda del esmalte blanco para aplicar a las cerámicas consiguió la fama. Él respondía afirmativamente a esta pregunta con la cual atacaba a los profesores de la Sorbona. “La práctica puede demostrar que las doctrinas de los filósofos (incluso los más celebres) pueden ser falsas”.

Los procedimientos de los artesanos, de los artistas y de los ingenieros tienen valor en relación con el progreso del saber. Debe otorgárseles, la dignidad de hechos culturales.

Los talleres de éstos artistas, son a la vez laboratorios que forman pintores, escultores, ingenieros, técnicos, constructores y diseñadores de máquinas, además del arte, se enseñan rudimentos de anatomía y de óptica, de perspectiva y geometría. El saber empírico de personajes como Leonardo da Vinci, es resultado de un entorno de este tipo.

Leonardo

Leonardo da Vinci (1452-1519), pintor, ingeniero, constructor y diseñador de máquinas, (hombre sin letras), y filósofo, se convirtió para los hombres modernos en el símbolo del hombre de múltiples conocimientos, de la superación de la antigua distinción entre operaciones manuales y mentales.

Leonardo tenía la necesidad de unir la teoría con la práctica. Las ciencias que comienzan en la mente carecen de certeza, porque en los discursos puramente mentales no hay experiencia, sin la cual nada proporciona certeza en sí mismo. Él defendía la convergencia entre la práctica y la teoría, pero era ambiguo en sus ideas, también es cierto que a la inversa, sólo hay certeza donde se pueden aplicar las matemáticas y quienes se aficionan a la práctica sin la ciencia son como pilotos que entran en el barco sin timón o brújula, que nunca saben con seguridad adónde van.

Sin embargo, las investigaciones de Leonardo, que eran extraordinariamente ricas en intuiciones brillantes y en ideas geniales, no pasaron de ser experimentos curiosos, sin alcanzar la sistematicidad que constituye una de las características fundamentales de la ciencia y la técnica modernas.

Una vez que los artistas son tomados en cuenta y elevados en su rango o status, las universidades y escuelas no son ya los únicos lugares donde se produce cultura, los que elaboran este saber, son los ingenieros o artistas-ingenieros, que van alcanzando una posición de prestigio igual o superior a la del médico, el mago, el astrónomo de corte o el profesor universitario.

La mayoría de los artistas del siglo XV proceden de ambientes artesanos, campesinos y pequeñoburgueses, -el arte en el siglo XIV era considerado como una actividad manual-. En los primeros años del siglo XV, en Florencia Italia, escultores y arquitectos eran miembros de la corporación menor de albañiles y carpinteros; los pintores pertenecían a la corporación mayor de los médicos y boticarios. Los arquitectos no eran solo constructores de edificios, se ocupaban también de construir máquinas de guerra, de preparar tribunas (máquinas) y complicados aparatos para las procesiones y fiestas.

Francis Bacon, fundador de la “ciencia moderna” hace tres valoraciones de las artes mecánicas.

1.- Sirven para revelar los procesos de la naturaleza, son una forma de conocimiento;

2.- Lar artes mecánicas crecen sobre sí mismas; son a diferencia de todas las otras formas del saber tradicional, un saber progresivo, y crecen tan velozmente que los deseos de los hombres cesan incluso antes de que aquéllas hayan alcanzado la perfección:

3.- En las artes mecánicas, a diferencia de las otras formas de cultura, existe colaboración, son una forma de saber colectivo: en ellas confluyen los ingenios de muchos, mientras que en las artes liberales los ingenios de muchos se sometieron al de una sola persona y los seguidores, por lo general, lo pervirtieron en vez de hacerlo progresar.

Los técnicos desconocen los usos que pueden hacerse de sus experimentos; los científicos y los teóricos ignoran que muchas de su desiderata podrían ser satisfechas por el trabajo de los mecánicos.[4]

Conforme a lo revisado, se puede concluir que la ciencia y la tecnología avanzó conforme la sociedad misma cambio, es decir, que derivado de las nuevas visiones y necesidades que ésta fue creando, -una vez generado el capitalismo y con el surgimiento del dinero-, de alguna manera los imperios (reyes), se vieron obligados a satisfacer esas necesidades, algunas en beneficio de la sociedad, dando paso al modernismo y al reconocimiento de los artesanos que llegaron a convertirse en los primeros ingenieros creadores de la tecnologìa y la ciencia.


[1] Hale John, El renacimiento en Grandes Épocas de la Humanidad, La Ruptura con la Edad Media, Madrid, 1978.
[2] Pérez Joseph, La Sociedad Española del Renacimiento, www.cervantesvirtual.com.
[3] García Tapia Nicolás y Carrillo Castillo Jesús, Tecnología e Imperio, UNAM, mayo 2002.
[4] Información tomada de Paolo Rossi, El nacimiento de la ciencia moderna en Europa, capítulo tres "Ingenieros”, pp.40-50.